sábado, 24 de octubre de 2009

El factor tiempo

Bien es cierto que los periodistas deben ofrecer una información ajustada a un tiempo y a un espacio determinado. En muchas ocasiones, el profesional de la información comete errores debido a la falta de tiempo. Estos errores, en la mayoría de casos, tienen que ver con la verificación de la información y el contraste de las fuentes. Para un buen contraste de fuentes es necesario preguntar a todas y cada una de las partes, ya sea dos, tres, cuatro o las personas que estén implicadas en un asunto. No obstante, el tiempo es un factor que juega en su contra e impide muchos de los pasos a seguir por un periodista a la hora de elaborar una información veraz.
En resumidas cuentas, cada información que se da a través de los medios, pierde en cierto modo algo de su contenido, debido a que, con el poco tiempo que se tiene para corroborar los hechos e informaciones, se corre el riesgo de equivocarse y brindar noticias erróneas.
¿Qué pensáis vosotros?

miércoles, 21 de octubre de 2009

Debate sobre la especialización

Las empresas comunicativas han evolucionado a lo largo de todos estos años.
Hoy en día, las empresas de comunicación prefieren a un periodista con unos conocimientos generales, que lo acapare todo, más que un periodista especializado. Ahora, más que nunca, en estos tiempos de crisis, las empresas fijan sus objetivos en profesionales que realicen múltiples funciones, como puede ser desde la redacción de noticias hasta el autocontrol en la parte técnica de una emisora de radio. El problema es, como muchos pueden pensar, que se multiplica la tarea por un mismo precio. Por lo que queda claro que el periodista debe ser multifuncional, o todoterreno, según denominan algunas empresas.
Por otra parte, un buen periodismo necesita de periodistas especializados, capaces de abordar una temática con un buen manejo de la información. Se exige un profesional que, gracias a sus conocimientos, sea capaz de sintetizar una información, haciéndola más accesible al público en general, sin que dicha información quede relegada a su esencia más básica.
Por lo tanto entramos en un gran debate. Por una parte se nos exige a los profesionales del periodismo que nos especialicemos para un gran dominio de la información y por otra parte las empresas no buscan este perfil.
¿Por qué nos decantamos?